La iniciativa forma parte de un plan de acción para reducir los residuos urbanos e implementar la separación obligatoria en el futuro
La Municipalidad de Rosario inició este martes una prueba piloto para la separación de residuos en un sector del barrio Sarmiento, emplazado en la zona norte de la ciudad.
El proyecto abarca la zona comprendida por Sorrento, Washington, Rondeau y Colombres. Tendrá una duración de seis meses y buscará promover y consolidar la separación de residuos orgánicos en origen, entre otras cosas.
La iniciativa forma parte de un plan de acciones para la reducción de residuos urbanos en la ciudad. Tiene como objetivo ser la fase inicial a la futura obligatoriedad de la separación de desechos en Rosario.
En este hilo, el intendente de la ciudad Pablo Javkin anunció días atrás el envío al Concejo de un proyecto de modificación para la ordenanza Nº 8335/2008, conocida popularmente como Basura Cero.
Con esto, buscan actualizar la normativa que, desde 2008, plantea medidas para la reducción del relleno sanitario en el ejido municipal.
El titular de la Secretaría de Ambiente y Espacio Público Diego Leone explicó que la elección de ese sector del barrio Sarmiento para la puesta en marcha de la prueba piloto, responde a que es una zona que ya tiene experiencia en la separación de residuos.
“Este sector se suma a los diez barrios de la ciudad pioneros en la separación de residuos orgánicos en origen. Más de 7.000 hogares separan sus residuos y la Municipalidad brinda un servicio de recolección alternada“, expresó el funcionario, y agregó: “Cada día se recoge un tipo de residuo: orgánicos, reciclables y restos“.
Finalmente, Leone señaló que la política del municipio en la materia tiene como objetivo final la disminución en la cantidad de residuos urbanos que terminan en el relleno sanitario.
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El proyecto “Basura Cero”
Rosario cuenta desde el 2008 con el plan “Basura Cero”. La iniciativa posee entre sus puntos fundamentales una serie de medidas destinadas a reducir los residuos reciclables y aprovechables al mínimo en el relleno sanitario.
Sin embargo, a 12 años de su aprobación en el Concejo, la situación está cada vez peor. Hoy se depositan varias toneladas más que en 2008; y el predio de Ricardone, que tenía siete hectáreas de montañas de basura al momento de la ordenanza, posee en la actualidad 40 hectáreas.
