A 43 años del inicio de la Guerra de Malvinas, un grupo de rosarinos mantiene viva una iniciativa que busca honrar por igual a todas las 909 víctimas del conflicto bélico, sin importar su nacionalidad. Un cuadro conmemorativo, fruto de una investigación minuciosa, exhibe los nombres de los 649 argentinos, 257 británicos y 3 malvinenses que perdieron la vida durante los 72 días que duró el enfrentamiento.
La idea surgió en el Colegio San Patricio de Rosario en los años 90, cuando un grupo de ciudadanos decidió “repensar la post guerra como un hecho trágico para Argentina, Gran Bretaña y los habitantes de las Islas Malvinas“. Con el objetivo de tender puentes, la Asociación Amigos de Malvinas se embarcó en una investigación exhaustiva.
El arquitecto Ricardo Gómez Kenny, de 88 años e integrante de la asociación, dedicó dos años a la meticulosa tarea de recopilar nombre por nombre de cada uno de los caídos. El trabajo no fue sencillo, especialmente cuando se trató de identificar a las víctimas británicas, cuyos nombres suelen registrarse solo con iniciales en los documentos oficiales.
Honrada recibir una copia de este homenaje a todos los caídos del conflicto de 1982, argentinos, británicos y isleños todos juntos, trabajo digno hecho por Ricardo Gómez Kenny, promotor de amistad entre nuestros pueblos. pic.twitter.com/4QOtG8474X
— Kirsty Hayes (@AmbKirstyHayes) April 22, 2022
“La embajada británica nos dijo que la idea era buena, pero que tendríamos que ingresar a las tres Fuerzas Armadas y nos pedirían muchas explicaciones“, relata Gómez Kenny a La Capital, lo que dilató el proyecto. La investigación avanzó gracias a la colaboración del superior de la Iglesia Anglicana en las Islas Malvinas, Richard Hines, y del cirujano de la Marina Real Rick Jolly, único excombatiente condecorado tanto por el Reino Unido como por Argentina.
El memorial, estrenado en 2012 en la Sala de las Banderas del Monumento Nacional a la Bandera en Rosario, consta de ocho columnas de nombres sobre un fondo que representa las Islas Malvinas. La disposición mezcla deliberadamente las identidades, sin distinción de nacionalidad, como símbolo de unión.
Un breve texto bilingüe titulado “El día que estalló Malvinas” acompaña la obra: “Hoy deben estar todos de la mano diciéndose ‘qué lástima que no resolviésemos las diferencias de otro modo’“, reflexiona el escrito que invita a “apoyar la integración humana de todos los habitantes”.
El memorial ha recorrido diversos espacios de Rosario, desde el Concejo Deliberante hasta galerías y centros educativos. La Cancillería Argentina también lo exhibió, y una copia fue enviada al colegio Slanley, donde se creó un Museo de las Islas Malvinas. En octubre de 2023, la embajadora del Reino Unido en Argentina, Kristy Hayes, recibió una copia durante su visita a Rosario.
Gómez Kenny, en lo que describe como “un pedido de despedida”, busca actualmente un espacio permanente donde colocar el cuadro para que toda la comunidad pueda recordar a las 909 personas que perdieron la vida durante el conflicto.
Esta iniciativa destaca, a más de cuatro décadas del conflicto, cómo la reconciliación y el homenaje conjunto pueden constituir una forma de sanar heridas históricas y construir puentes entre naciones que alguna vez se enfrentaron en el campo de batalla.