Las empresas que produzcan o importen alimentos genéticamente modificados deben cumplir con el reglamento.
Los alimentos genéticamente modificados que se comercialicen en Bolivia, sean nacionales o importados, deben llevar una etiqueta con la sigla OGM (Organismos Genéticamente Modificados). Las empresas correspondientes tienen un plazo de dos años para implementar esa resolución.
El anuncio fue hecho por la ministra de Medio Ambiente y Aguas, Alexandra Moreira, en conmemoración al Día Mundial del Medio Ambiente. La medida dará cumplimiento al Decreto Supremo 2452. “Hemos podido desarrollar el reglamento correspondiente que va a hacer efectiva esta implementación del etiquetado los OGM.
Tenemos un plazo hasta 2018”, manifestó ayer la autoridad en una conferencia de prensa. El Decreto Supremo 2452 del 15 de julio de 2015 instruye la obligatoriedad de que todo alimento genéticamente modificado lleve la etiqueta y símbolo de advertencia de que contiene transgénicos.
La etiqueta de color amarillo permitirá a la persona que adquiera estos productos saber que contiene y derivan de organismos genéticamente modificados. “Es parte de los derechos de información del consumidor”, afirmó Moreira. La medida pretende incentivar la producción orgánica realizada por los habitantes de las áreas protegidas.
Este tipo de producción logra alimentos más saludables y nutritivos. Asimismo, Moreira agregó que la cartera que dirige no está en desacuerdo con la biotecnología, pero que es necesario regular estos productos y aclaró que los alimentos que lleven etiquetado no están prohibidos, sólo es un mecanismo de información para un consumo consciente.
Fuente: Redacción Diario Pagina siete