Cerca de las cuatro de la tarde cayeron piedras en toda la ciudad de Rosario
Finalmente llovió y fue un gran alivio no sólo para las plantas secas sino también para el fuego que arde en las islas y que este viernes traían su humo tóxico a la ciudad con mucha fuerza. Pero el SMN también planteó la posibilidad de algo más que agua: ráfagas de viento y posible caída de granizo, que finalmente ocurrió alrededor de las cuatro de la tarde.